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domingo, 17 de mayo de 2009

¿Quién quiere ser director de la FESC?

Tórtora trajo el tema de mi “interés” por la dirección de la FESC y como él dice, no debe ser el único en creerlo. De hecho algunas personas me lo han dicho en los patios de la escuela. Quiero ser totalmente claro al respecto: mi interés no es ser director, sí lo es que la mafia no siga dominando la escuela y estoy dispuesto a ayudar a TODOS quienes se quieran postular, con ese eje de campaña: des Armando la Mafia.

Todos sabemos que el proceso de elección de director es un proceso complejo en el que intervienen muchas instancias: La comunidad de la dependencia para la que se va a nombrar director, el secretario general, el rector, la junta de gobierno y líderes académicos y gremiales dentro de toda la UNAM.

La junta de gobierno elige a partir de una terna que propone el rector, quien a su vez para hacerla, entrevista a un cierto número de candidatos a partir de una lista que le pasa el secretario general, el que también ha entrevistado a varios de las personas que la comunidad de la dependencia mencionó en la primera etapa del proceso.

A veces se piensa que el proceso se decide fuera de la dependencia y no es así. Es cierto que lo hace una instancia externa, la junta de gobierno, pero lo hace a partir de la información que recaba de los miembros de la comunidad. Estoy seguro que con documentos que mostraran manejos irregulares en las asignaciones de plazas, publicación de artículos, hostigamiento a profesores, etc. La junta de gobierno no nombraría a un candidato de la mafia, pero no podemos ir a la junta de gobierno nada mas a decir no queremos a la mafía, tenemos que documentar nuestros dichos y en eso no nos van a ayudar las denuncias anónimas.

Si queremos el cambio de a de veras tendremos que dar nuestros nombres o como dicen: “callar para siempre”. Tampoco es muy conveniente llegar con las autoridades correspondientes nada más a decir lo que no queremos, sería bueno tener alternativas, de ser posible personalidades que no polaricen a la facultad, académicos con consenso, con autoridad moral.

Ya señalaba Tórtora la necesidad de alinear la marcha de la FESC con el resto de la UNAM. ¿Cuántos aspirantes conocen el plan de trabajo del rector? ¿Cómo armonizarían su eventual plan de trabajo de directores con el del rector? Es indispensable que quienes aspiren convenzan al rector de que su plan para la facultad se inscribe en el plan de él para la UNAM.

También al rector y al secretario general, quienes conducirán el proceso, debemos hacerles llegar nuestros argumentos, nuestras dudas, nuestros temores, nuestras quejas. Si los argumentos son sólidos los tomaran en cuenta. Preparar esas presentaciones debe ser nuestra tarea. Preocupémonos más de dar a conocer la situación de la Facultad que de especular sobre quienes pueden o no ser candidatos. Actuemos como comunidad.

Ser director no es disfrutar de prebendas, asistir a eventos sociales y estar en los presidums. Es ser un líder de la comunidad, trabajar a veces más que el resto, enfrentar con valor problemas añejos, ser justo. Quienes le quieran entrar al asunto de postularse, piensen en eso antes que en lo bonito que se ve en la puerta el letrero de“Director”. Piensen quienes quieran ser director en asumir el compromiso de ir des Armando la mafia.

La estrategia que preveo es simple: Definir el mayor número posible de candidatos viables, que no sean afines ni víctimas potenciales de la mafia y apoyarlos a todos. Crear una mayoría alrededor de sus nombres. Documentar las razones por las que no queremos a la mafia vinculada a la dirección de la FESC y hacerlas del conocimiento público. Estoy seguro que seremos oídos.

Y entonces a lo mejor el blog no resulta tan inoportuno.

9 comentarios:

  1. Estimado Rafael, la pregunta es importante y comprometedora, así mismo un reto nada fácil de asumir si lo consideramos con ética, respeto y compromiso sin embargo me parece que la estrategia que se plantea puede ser interesante y por lo mismo incluyente por lo que no te elimines de la lista, también es importante considerar que no solo el Director(a) hace el trabajo se debe contar con un equipo de características afines y afortunadamente en la FESC lo hay y para hacerla crecer.

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  2. Querido Rafa: Ahora si te brincaste la barda, ¿a la vejez viruela?. Si concuerdo plenamente contigo, respecto a que una argumentación sólida, que muestre elementos que los grupos de poder en la UNAM desconocían respecto a un candidato, puede hacerlos dar marcha atrás. Pero de ahi a suponer que un candidato a director surge de la propuesta de la comunidad, perdón pero eso no me lo trago ni disuelto en el Atlántico, claro que si debe haber alguna propuesta a favor del citado, del iluminado, pero que dependa de la comunidad nada más NO y en el caso Cuautitlán menos que menos!!!.
    Los candidatos con posibilidades son aquellos que cuentan con el respaldo de alguno de los grandes grupos de poder en la UNAM: "los abogados, los ingenieros, los Institutos, los médicos, en algún caso los químicos", el resto es charaliza que se arremolina junto a alguno de estos grupos. Estos grupos, así como proponen a su candidato, llegado el caso creo que también lo negocian ... "apoyo a tu candidato en Cuati, pero tú vas por el mío en Psicología" y mi amig@, eras, nuestr@ candidat@.
    Es más, tengo la impresión de que si en alguna Facultad o Instituto, un candidato de la Comunidad logra un apoyo muy amplio, supera extensamente a los demás, ese sería un poderosos argumento para considerarlo peligroso y descartarlo. Imagínate un candidato con amplio apoyo en FES-C, con los problemas de esta Facultad, parado con SU COMUNIDAD frente a la rectoría, nada más exigiendo y argumentos nos sobran, trato equitativo en lo presupuestal ¿te lo imaginas?. De todas formas te diré que considerando los "modelos mexicanos" de elección de autoridades universitarias, entre el modelo "democrático" tipo Chapingo y el modelo UNAM, sin duda y por mucho, me quedo con el modelo UNAM. Un abrazo, Jorge

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  3. Rafael: perdón por quitar tanto espacio, pero se me olvidó aclarar. Parece que tú también pensaste que mi "objeción" a la temporalidad del Blog, era porque te estuvieras candidateando. Nuevamente intento aclarar, yo me referí en forma general a un año complejo, por la elección de director, para que apareciera el Blog, no a tu posible candidatura y los que trajeron a colación tu candidatura y tus derechos, fueron los anónimos que me salieron al quite. Nuevamente saludos, J. Tórtora

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  4. Hola Rafael,
    Después de que hemos padecido la peor administración en toda la historia de la FESC, me parecen excelentes las propuestas de acción que tu propones, por supuesto que hay un número extenso de violaciones al EPA y al CCT de los académicos cometidos por esta administración, y que se encuentran documentados, hay que exhibir estos documentos junto con todas las demandas en contra de la FESC que se encuentran ya en la Junta de Conciliación y Arbitraje. Por supuesto que hay que pedir Rendición de Cuentas. Cuando se ha discriminado a un miembro del personal académico, cuando se le ha acosado laboralmente, cuando a un profesor le eliminaron sus asignaturas definitivas en los nuevos Planes de Estudios, etc., etc., etc. La administración actual ha violentado la Legislación Universitaria , existe algún castigo para ellos?
    Me gustaría que el próximo director de la FESC fuera cualquier profesor de la FESC que esté dispuesto a quitarle el control de esta Facultad al grupo que se ha mantenido en el poder por más de 28 años.
    Ojalá que el Dr. David Quintanar, el Dr. René Miranda, el Dr. Penieres, tú mismo, y cualquier otro profesor que se ubique en “desarmando a la mafia”, pensaran seriamente en ser candidatos a la Dirección de esta facultad.
    Es verdad que el proceso de elección no es democrático, es verdad que operan grupos de poder en la UNAM, pero lo peor que podemos hacer es callar las injusticias cometidas por la administración actual, que han tenido como consecuencia el conducir mal el trabajo de docencia e investigación en la FESC

    Ana Leticia

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  5. En una ocasión me tocó esperar en la casa de uno de los candidatos a la dirección, ver si él era o no el elegido. Había mucha tensión en el ambiente, todos deseabamos que sonara el teléfono y lo felicitaran, pero... el teléfono sonó y le dijeron que no, que lamentablemente el nuevo director era otro de los aspirantes. Todos nos sentimos muy tristes, pero él decidió poner música, sacó a su hija a bailar y luego nos contagió a todos.
    Luego llegamos a la conclusión, de que es un honor participar en la "rifa del tigre", pero cuando se enfrenta esa realidad, es mejor seguir bailando.
    Por eso creo que eres sincero cuando dices "no quiero aspirar a la dirección", camino que no es un lecho de rosas, sino de plantas espinosas que hay que estar siempre toreando.

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  6. Grecia, creo que el día que mencionas yo estaba en otra casa, con otro candidato y le tocó recibir la llamda de "Se sacó usted el Tigre". Eso de la dirección y los "suspirantes" me recuerda que en 1972, siendo yo estudiante de la Facultad de Ciencias, el movimiento de Olivos Cuellar y Perez Arreola llevó a la renuncia del rector González Casanova. Se empezaron a barajar nombres de posibles sucesores, entre ellos los del Dr. Lozano, quien era director de la facultad de Ciencias.
    Un día varios estudiantes, al verlo en el patio, nos acercamos a él y le preguntamos si quería ser rector. Lozano nos contestó algo como: "A mi me gusta los domingos irme a los toros y echarme unas copas en la plaza. ¿Se imaginan los periódicos del lunes diciendo: El rector estaba pedo en los toros (así hablaba Lozano). No muchachos, yo no quiero ser rector, yo lo que quiero es seguir yendo a los toros los domingos."

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  7. Empecé a contestarle a Jorge Tórtora y me salió un texto que rebasa los límites de caracteres para un comentario. Así que lo he partido en dos. Esta es la primera parte, la de los acuerdos:
    Tórtora, en realidad no creo que haya tanta diferencia entre lo que decimos ambos, salvo por la manera de destacar los desacuerdos como algo intragable. Veamos: Yo digo de la elección de director: “Es un proceso complejo en el que intervienen muchas instancias: La comunidad de la dependencia para la que se va a nombrar director, el secretario general, el rector, la junta de gobierno y líderes académicos y gremiales dentro de toda la UNAM.” Tu dices: “que dependa de la comunidad nada más NO”.
    Estamos diciendo lo mismo; yo haga explícitas las otras instancias de las que depende la elección y tu no, pero es lo mismo. No necesitas el agua del Atlántico para tragártelo.
    Creo que el párrafo que provoca tu comentario es: “A veces se piensa que el proceso se decide fuera de la dependencia y no es así. Es cierto que lo hace una instancia externa, la junta de gobierno, pero lo hace a partir de la información que recaba de los miembros de la comunidad. Estoy seguro que con documentos que mostraran manejos irregulares en las asignaciones de plazas, publicación de artículos, hostigamiento a profesores, etc. La junta de gobierno no nombraría a un candidato de la mafia” También en lo esencial de esas líneas estás de acuerdo, tu lo dices así: “concuerdo plenamente contigo, respecto a que una argumentación sólida, que muestre elementos que los grupos de poder en la UNAM desconocían respecto a un candidato, puede hacerlos dar marcha atrás.”

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  8. Ahora los disensos y otras ideas:
    La diferencia, que sí existe, está en éstos dos párrafos, yo digo:” lo hace a partir de la información que recaba de los miembros de la comunidad” y tu: “suponer que un candidato a director surge de la propuesta de la comunidad, perdón pero eso no me lo trago ni disuelto en el Atlántico.”
    Si no pensamos que los candidatos surgen de la auscultación, entonces creemos en una imposición permanente de directores. Si fuera el caso, algo que no creo, querría decir que no hemos sido capaces como comunidad de hacer ver a las autoridades de la UNAM, que ya tenemos mayoría de edad y que somos capaces de tener personas con capacidad de gestión (no solo de “producir” papers), honestos, con conocimiento y cariño a la dependencia. Si ese fuera el caso a la mejor ya es tiempo de decirselos, pero si nos enconchamos con el argumento de que eso se decide afuera y a ver a quién escogen, propiciamos que ocurra.
    En mi opinión las Unidades Multidisciplinarias son un crucigrama para muchas de las personas de Ciudad Universitaria que no las entienden bien, ni las quieren entender. Me tocó estar muy cerca del esfuerzo más serio que se ha hecho para dar a las Unidades Multidisciplinarias su lugar en la UNAM, tu lo conociste; lo encabezaba el Dr. Laguna, a nombre del Dr. Sarukhan.
    La mayoría de los buenos académicos de las multidisciplinarias no son a veces muy conocidos fuera de ellas, tendemos a ser muy locales y a veces cuando alguien destaca un poco, se va a otra dependencia y cuando se trata de elegir candidatos a la dirección no hay muchos que sean conocidos fuera de la Facultad. Si no se les conoce, no se les va a elegir; es obvio.
    También es lógico que los directores de las dependencias que tienen las mismas carreras que la FESC tengan un interés genuino en que las cosas se hagan bien aquí, pero de ahí a que sean grupos oligopólicos imponiendo su voluntad y los demás charales, me parece que hay un océano (Atlántico) de diferencia.
    En cuanto a si contar con el apoyo mayoritario de la comunidad es un argumento para considerar peligroso a un candidato y descartarlo, no estoy tan seguro. Creo mas bien que ha sido la ausencia de líderes de éstas características las que no han permitido que las Unidades Multidisciplinarias se desarrollen. Quizás el proceso de cambio de director es una oportunidad de exponer ante las autoridades universitarias el modelo de escuela que queremos, con un líder con consenso, capaz de sacar adelante el proyecto. Si yo fuera el rector, me encantaría encontrar una persona con esas condiciones y que me ayudara a sacar adelante la tarea de descentralizar realmente a la Universidad.
    Y no siendo el rector también me encantaría encontrarlo, así que vamos proponiendo varios candidatos y vamos dándolos a conocer entre nuestros contactos de Ciudad Universitaria, porque tenemos que seguir des Armando la mafia.

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  9. Lozano quería seguir yendo a los toros y el otro candidato querìa seguir bailando. Esto parece trivial, pero finalmente es importante. Un día platicando con un ex director en plena jornada laboral, dijo ya agotado: "Estoy deseando que esto se acabe, quiero irme a mi casa a hacer lo que se me antoje." Creo que por eso se comienza con singular entusiasmo, pero luego la energía se va agotando, las ilusiones de hacer cambios esenciales se van cayendo una a una y esos importantes personajes lo único que desean es pasar a formar parte de una tropa, que trabaja con cierta flexibilidad, que no asiste a juntas aburridas, que no se pelea con los consejeros en eternas sesiones que nunca se sabe a donde llegan... Eso si, se tiene un sueldo tentador finalmente.

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