Este blog es una especie de respuesta anticipada a la invitación de Stéphane Hessel a indignarse. Nace de la indignación de que un grupo de profesores de la FES Cuautitlan –la mafia- haya por mas de 30 años usado y abusado los puestos de funcionarios y de elección popular.
Pero el blog se ha convertido también en un espacio donde se comparten experiencias docentes, temas de divulgación de la ciencia, literatura y opiniones.
Bienvenidos!!!
Quisiera poder escribir que opinar en este blog no es mal visto por la mafia y que poner nuestro nombre no significa ningún riesgo. Desafortunadamente no es así. Éste es un blog que, desde su nombre, manifiesta una postura crítica a ciertas prácticas del grupo que domina la dirección, el consejo técnico y varias instancias administrativas más de la facultad. Creo, sin embargo que ese riesgo disminuye en la medida en que lo afrontamos juntos y en la medida en que hacemos público, firmándolo con nuestros nombres, lo que ocurre en la facultad. Esa es nuestra fuerza.
Ese riesgo disminuirá también en la medida en que muchos profesores que no son señalados como "incomodos" se inscriban y participen proponiendo temas para el debate o simplemente la conversación y la convivencia de la comunidad virtual. En la medida en que este blog, sea el blog de todos, participar en él dejará de ser un riesgo.
Este texto es una invitación a los sin-nombre de la FESC a deponer el anonimato, a dar un paso al frente, a levantar la mano y a participar en un debate justo, honesto, abierto, generoso, no sin humor y quizas no sin uno que otro dardo. Una invitación a ser valientes.
Nosotros podemos poner la voz, que es el blog, pero como dice el eslogan de radio UNAM, de todos es la palabra. Y sin sus palabras de poco vale este espacio e imposible es el cambio.
El "agresivo y mal pensado" Jorge Tórtora, me ha enviado un texto, que creo merece ser conocido y comentado en el blog:
"Estimado Rafael: Revisé el contenido del “Blog”, creo que el momento en que aparece no es el más feliz, aunque el motivo señalado haya sido la elección de consejeros académicos de área. Para un mal pensado como Yo, suena más a una aparición en año de cambio de la dirección, pero en fin, eso seguramente solo le pasa a los mal pensados. Como sea, cualquier espacio de discusión debe ser bienvenido en la Universidad, diría incluso que estos espacios son la esencia de la Universidad, cuando son manejados con actitud, con espíritu universitario y sin duda son una carencia histórica en la FES-C, así que …bienvenida la iniciativa. Ya sabes además que Yo también soy un agresivo, que todo lo quiero resolver con “rifle sanitario”. Me surgen algunas preocupaciones, ya no de mis malos pensamientos, sino de lo que Yo entiendo por actitud universitaria y en este espacio para mi es claro que tu compartes esa actitud, por que te conozco y por firmar la autoría de este espacio. Pero si tú firmas tus comentarios … ¿por qué se permiten anónimos? nada más alejado de la actitud universitaria y promotor del chisme sin fundamento que el anónimo. ¿Por temor a las represalias? otro elemento alejado de la actitud universitaria. Si entre otras cosas se van a denunciar represalias y represores, por no corresponder al espacio universitario, tampoco se deben permitir agazapados en el anonimato, me gustaría que reconsideraras este aspecto y solo se acepte la participación con firma. Me preocupan comentarios que parecen ignorar los procedimientos de la UNAM y que derivan en situaciones digamos “extrañas” ¿para qué se solicitan los currículos de los consejeros, en que parte del estatuto general dice que estos deben ser “insignes” profesores? ¿quién va a evaluar los currículos? ¿Y si el currículo resulta pobre o lamentable, qué? para ser Consejero técnico o universitario, solo se requiere ser votado, fueron votados y lograron mayoría, punto. La UNAM en este sentido mantiene una grave omisión, al no establecer requisitos académicos claros a los aspirantes a ser electos como consejeros y en contraste si haberlos establecido para sus órganos auxiliares, las Comisiones Dictaminadoras, que además deben ser ratificadas por los CAAs. De esta incongruencia han surgido, surgen y seguirán surgiendo graves incompatibilidades entre los dictámenes de las comisiones y los “refrendos” del H. Consejo. ¿Qué nadie ha leído los lineamientos de evaluación con que el H. Consejo amordazó a las dictaminadoras, nadie se ha percatado del “ligero” desajuste en la puntuación entre un resumen en congreso y un artículo científico en revista arbitrada?, yo creo que si lo han leído, pero ocurre que a la mayoría le convienen estos lineamientos, aunque resulten verdaderamente ridículos. Por lo mismo me extraña el comentario de: “habrá terreno para que prosperen arbitrariedades y se trate de marginar de los órganos colegiados a quienes no piensan como el grupo en el poder”. Tenemos el H. Consejo que nos merecemos, o ¿alguien puede ser tan iluso de suponer que de una comunidad mediocre surgirá un Consejo de altura? ¿alguien espera que un mediocre elija a un académico como su representante?, cuidado!!! será mediocre pero mínimamente tiene instinto de conservación y como el Consejo trata los asuntos con más actitud de dirigencia sindical que de análisis académico, pues se vota con ese criterio. Y si no recuerda el relajete y los manifiestos que surgieron cuando la “Comunidad académica” de esta Facultad, se dio cuenta que ahora tenía que elegir a los dictaminadores de un reducido grupo de profesores, los que daban “el ancho” al cumplir con los requisitos establecidos en los CAAs. En esta Facultad además es claro, que históricamente los consejeros realmente académicos han surgido de los Dptos. académicos y aclaro que Yo en términos generales he estado y estoy conforme con mis consejeros, aunque les he tenido que aguantar el argumento de que los que votaron mal fueron los otros y nunca han salido a expresar su posición frente a la comunidad, por ahí hay algo contagioso en este órgano colegiado, ¿o será el espíritu de cuerpo?. Tampoco se requiere un análisis curricular para elegir un funcionario, es una plaza de con-fian-za, ¿qué importa que un Secretario sea o no doctor?, coincidiendo en que lo Dr. no quita lo estúpido y agregaría, …que por el contrario lo agrava. En lo personal me asombré cuando el Dr. Keller solicitó los currículos de quienes iban a formar su administración, aclaro que de todas formas nunca supe como los utilizó. Pero obviamente por eso es una plaza de CONFIANZA y solo le rinde cuentas a su jefe, no a la Comunidad, al fin que tampoco la Comunidad elije al jefe ¿o sí?. Finalmente la FES-C si es la UNAM, si se quiere una versión caricaturizada, donde los problemas aparecen magnificados, pero es la UNAM, así es toda la UNAM y en lo personal no veo señales de cambio. Y si ocurrieran cambios, … ¿cómo reaccionaría la comunidad académica de la UNAM y la nuestra, si se eliminara la cláusula de definitividad y en lugar de pasar a la báscula cada tres años por un PRIDE, pasáramos a la báscula para que se definiera nuestra permanencia en la plaza, en función de nuestra productividad, nuestro cumplimiento y la opinión de los alumnos?, o ¿es sano mantener en nómina malos profesores?, sería EL HORROR !! hasta los interinos protestarían, ¿verdad?. Rafael, bienvenida tú iniciativa que prospere, un abrazo, el mal pensado y agresivo, J. Tórtora. PD: Si te sirve puedes meterlo al Blog, es catarsis personal".