Hace muchos años se hizo frente al museo de antropología una exhibición de simultáneas, con motivo de algún torneo internacional. Las simultáneas las jugábamos una serie de aficionados contra los grandes maestros que iban a participar en el torneo. Ahí gané mi partida, contra uno de los maestros internacionales y me dieron de premio un libro de la colección Escaques, cuyo título es el que tiene esta entrada del Bolg: Como piensan los grandes maestros.
Explica el libro que existe una diferencia esencial entre la manera como piensan los aficionados y la forma como lo hacen los grandes maestros. La misma idea la retoma el ex campeón mundial Max Euwe en sus libros el amateur vs el gran maestro y el amateur se vuelve gran maestro, me encantaría seguir escribiendo de ajedrez y explicar las ideas de estos libros, pero en realidad los he mencionado porque en estos días he estado pensando en todo lo que hemos escrito y comentado en el blog y veo que es solamente una perspectiva de las cosas, pero hay otras perspectivas.
¿Cómo se ven los mismos asuntos desde otra perspectiva, cómo se ven con otros niveles de profundidad en el análisis? Me parece que ambas son cuestiones interesantes porque por más importante que a nosotros, en la FESC, nos pueda parecer un asunto; quizás no lo sea tanto desde la perspectiva de la administración central o de la junta de gobierno y ciertamente no lo es desde la perspectiva de la mafia que controla la escuela.
Para entender cómo piensan cada uno preguntémonos que quieren: La directora, por ejemplo quiere reelegirse, por lo tanto buscará dar una imagen de su gestión acorde a lo que ella cree que es lo que se esta esperando de ella. Es decir, como se dice coloquialmente tratará de “quedar bien” con quienes deciden el nombramiento y cómo en ese proceso, en su perspectiva, la participación de la comunidad de la FESC es poco importante, pues no le preocupará lo que la comunidad opine.
Eso podría ser un error de soberbia, pero también podría no serlo, porque en realidad lo que importa es cómo perciben esa conducta otros protagonistas del proceso de nombramiento de director. En reuniones sociales he oído que Suemi ha llevado muy bien la facultad; un juicio como ese me sorprende de entrada, pero luego pienso que yo mismo podría estar pensando eso si no estuviera en la FESC, es decir que en un nivel distinto de análisis las trapacerías de la Mafia no se notan. Lo que se nota es el resultado final de la gestión de la directora.
Trataré de analizar otros ángulos y otros niveles de análisis en próximas entradas del blog.
No hay comentarios:
Publicar un comentario