Buscar este blog

Mostrando entradas con la etiqueta difusion cultural. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta difusion cultural. Mostrar todas las entradas

sábado, 19 de septiembre de 2009

Sueño de una noche de Verano. (Encuesta número 13)

19 de septiembre de 2009, imposible olvidar esta fecha. Hace 24 años del mayor temblor en el DF de que nuestras generaciones tengan memoria. A veces no se muy bien en que día vivo, pero hoy vi la fecha porque quería saber si ya estábamos en Otoño y veo que aun no, aunque ya falta muy poco. Quería saber si lo que soñamos hoy, es todavía el sueño de una noche de verano. Hago el juego de palabras, obviamente, con la obra de Shakespeare que se representa este fin de semana en el teatro Covarrubias del centro cultural universitario y lo hago por que ayer tuve que ir a Ciudad Universitaria a arreglar unos papeles y pasé por el centro cultural, serían pasadas las siete de la noche. El lugar era una fiesta de vida, personas de todas las edades caminaban alrededor de la fuente que está en la plaza alrededor de la cual están los teatros, los cines y la sala Nezahualcoyotl. A un lado de la fuente, el edificio que tiene en la planta baja la librería Julio Torri y en la parte de arriba el restaurante Azul y Oro.

Los boletos para la función del viernes estaban agotados, para la función del sábado ya no había con descuento a universitarios y para la del domingo quedaban 20 boletos con descuento. Todo un éxito.

No resistí la tentación de subir al restaurante a echarme un chocolate con agua. El Azul y oro es uno de los pocos lugares que conozco donde hacen bien esa bebida. Mientras me tomaba el chocolate, cavilaba en la encuesta de la semana del blog, pensaba: ¿si la cultura en la FESC se hiciera de otra manera, podríamos tener viernes por la noche con la efervescencia cultural que se respiraba ayer en el Centro Cultural de Ciudad Universitaria? Hace tiempo que no voy a Acatlán a la muestra del cine o al teatro, pero en algún momento esta multidisciplinaria logró ser un polo cultural en la zona. Tiene unas instalaciones muy buenas para teatro, funciones de cine y presentaciones de actividades musicales.

Y mientras me terminaba el chocolatem se iba venciendo el plazo para la votación en la página del blog, quedando los números siguientes:

19 Votantes. De los cuáles 18 piensan que las actividades culturales en la FESC parecen ser llevadas a cabo para salir del paso y una, que en este caso representa el 5 %, opina que se hacen con interés. ¿Será un sueño de una noche de verano que veamos en la FESC el Sueño de una noche de verano? Creo que no, los encargados de difusión cultural de la FESC tienen todas las posibilidades de solicitarlo y conseguirlo. Ojala lo hagan

domingo, 13 de septiembre de 2009

Seamos realistas.

Hace cuarenta y un años del famoso reclamo de “La imaginación al poder”, los jóvenes que la corearon en las calles y la escribieron en las bardas son ahora hombres maduros, el mayo francés de 1968 es parte de la historia y todos somos sus herederos, al menos en la retórica o conocen a alguien que critique el movimiento del 68

Sin embargo la frase permanece como muestra del anhelo de que las cosas funcionen mejor. Recuerdo ahora la frase, por el comentario de Josué sobre la extensión cultural en la FES C. No se si sea un asunto de presupuesto, pero ciertamente lo es de imaginación. La mayor parte de las personas tienen como principal trabajo, conservar su trabajo. Es decir no les interesa hacer nada innovador sino no parecer riesgosos a sus jefes. Ya Beatriz Agratti (ahora sí con doble t) me decía que soy un romántico por mi observación de que varios maestros del departamento de física están ahí para cobrar un salario y mantener un puesto y no por amor a lo que hacen. No digo que sean malas personas, si acaso no son muy buenos profesores y si me pongo indulgente, son más víctimas que culpables, pero pueden resultar en su inseguridad y servilismo tremendamente dañinos.

Ya perdí la esperanza (espero que no el romanticismo) de que estos profesores adhieran a un movimiento que pretenda mejorar la enseñanza de la física, lo harán si y solo si se los dice la autoridad y el día que se los diga serán incapaces de aportar ninguna idea nueva, acostumbrados como están a recibir instrucciones. Me conformo hoy con que esos profesores no obstruyan demasiado a quienes si ven en la docencia una actividad en la que vale la pena tomarse el riesgo de innovar y de contradecir.

Eso que pasa en el departamento de física de manera exacerbada no le es, desafortunadamente privativo, pasa en otras áreas entre ellas también la de la cultura. Que mal valoramos en la Facultad a la cultura y que falta nos hace que muchos de quienes “toman decisiones” tengan un poquito más de cultura. Que dejen de preocuparse por el número de eventos que presentan y se ocupen de su contribución a la formación integral de los estudiantes.

Hace casi veinte años, lanzamos el programa de conferencias de divulgación científica: Ciencia, Conciencia y Café, del que ya he platicado en éste blog, motivados no por mantener un empleo (ni siquiera era nuestra ocupación hacerlo) sino por tratar de ayudar a los alumnos de la FESC a tener una formación científica equilibrada con una visión social. Este no era un programa cultural que nos mandara CU, era un proyecto “Made in Cuautitlan” ¿por qué hoy no generamos nuestros propios programas culturales? No es por falta de presupuesto (que claro que estaría muy mal que se hiciera un uso indebido de él), sino de imaginación.

Otro ejemplo: Durante diez números mantuvimos la publicación bimensual de la revista Marcha, el órgano informativo del colegio académico (era el blog de entonces) con cero pesos y cero centavos de presupuesto. Con una maestra (saludos Gloria Soto) que mecanografiaba los artículos y un compañero que nos los imprimía gratuitamente. La imaginación consigue los recursos.

Antes de terminar con el tema de la imaginación y el poder, Josué, quisiera decirte dos cosas: una que estamos haciendo, con un profesor de la Facultad de Ciencias que toca el piano, un curso de apreciación musical, creo que eventualmente te interesaría y dos que discrepo en parte de la línea tan tajante que trazas en la manera de evaluar. Es muy claro que la subjetividad tiene un rol importante e incluso hay varios estudios al respecto. En el caso de la música, por ejemplo, la intensidad del sonido se mide en decibeles y es una manifestación de la cantidad de energía de la onda sonora, pero cuando a un grupo de personas se les hace escuchar un sonido y a continuación se disminuye el volumen y se les solicita señalar en que momento el volumen alcanza la mitad del sonido original, no hay uniformidad. Esos experimentos llevaron a desarrollar una escala “subjetiva” cuya unidad es el son.

Bueno, ahora sí termino con otra frase del movimiento del 68 en Francia: “Seamos realistas pidamos lo imposible”


Pd. Bienvenido Armando Mendez, nuevo seguidor.