la foto de la Bruja negra.
No me había percatado de en qué época del año ocurría, pero de vez en cuando aparecían, como manchas negras, pegadas a los muros de afuera de la casa o en algunas de las paredes interiores, cercanas a las ventanas del baño de la planta baja, También en las habitaciones de la planta alta, llegaban a encontrarse cerca de las ventanas, que en verano siempre tengo abiertas.
Lo que me hizo fijarme en esos peculiares insectos nocturnos que en inglés se llaman Black Witch, o Bruja Negra, y nosotros designamos como mariposa negra o nocturna,
fue sobre todo el horror que causaban en ciertas personas. Este año apenás, me di cuenta que
llegaban con la temporada de lluvias en
la Ciudad de México.
Recordé los primeros años de mi educación primaria, cursados en una escuela bilingüe en la que
por las tardes recibíamos clases de ciencias naturales, en inglés. Ahí aprendí
la palabra “moth” para la que, en aquella época, no tenía referente en español.
El libro que usábamos traía imágenes que la maestra nos hacía observar mientras
insistía en que no se trataba de mariposas. Recuerdo su empeño por que
notáramos las diferencias en las antenas.
Tiempo después; no recuerdo cuándo, dónde ni por qué, asocié
a la palabra inglesa “moth”, la española
“polilla”, aunque a decir verdad nunca la usé para designar a los majestuosos
lepidópteros nocturnos que tanto horror causan en algunas personas.
Llamé lepidópteros a
las “mariposas negras” en recuerdo de mi maestra de ciencias naturales de la
primaria que se afanaba en que distinguiera “moth” de “butterfly”. Y efectivamente no son lo mismo, juntos polillas y mariposas componen el orden
de los lepidópteros.
Por cierto que la palabra lepidóptero me parece muy bella, significa
literalmente de “alas con escamas” y son una Orden dentro de la clase Insecta. de
la Filo Artropoda en el reino animal
No recuerdo tampoco donde aprendí la palabra lepidóptero
pero sí la de himenóptero “alas de membrana”. Fue en mi libro de lectura de sexto año que cursaba, ahora en una escuela pública. El libro se
llamaba Cielo, Tierra y Mar y el
autor era Valentín Zamora Orozco.
Siempre me gustó entender el significado de las palabras a
través de su etimología. Esto aunado a
otro gusto, un tanto neurótico, por las clasificaciones contribuyó seguramente
a que la biología me pareciera una ciencia interesante. La taxonomía de Lineo y
la de Sharp con los nombres de familias, géneros y especies hacían muy
interesante el estudio del mundo de los insectos.
Años después, ya estudiando
física en la Facultad de Ciencias, acompañé a
algunas amigas biólogas a recolectar insectos, como parte de sus prácticas de
campo de zoología III. Los lepidópteros son parte de un supraorden de insectos
que sufren metamorfosis, esa supraorden se llama holometábola.
Pero volvamos a la mariposa nocturna, Bruja Negra o Ascalapha Odorata, como se le conoce de
acuerdo a la taxonomía de Lineo. Es miembro de la familia Noctuidae, la más grande dentro de los lepidópteros.
Hace unos días cuando salía de casa por la mañana encontré una de
ellas pegada al muro, totalmente quieta. Me acerqué, saqué el celular y le tomé
una foto, la que ilustra este texto. Pude observar los rayos del sol iridiscentes sobre sus alas escamosas
(es un lepidóptero, pensé). Vi los tonos verdosos y me pareció bella. Pensé en la
gente que les tiene asco y decidí averiguar un poquito más de ellas.
Me llamó la atención la comparación que se realiza entre los
hábitos migratorias de las Ascalapha
Odorata y las mariposas Monarca en el texto The Black Witch Moth: Its Natural & Cultural History de Mike Quinn.
Por ejemplo que las Monarca tienen una especie de hibernación, mientras que las
Ascalapha Odorata no.
Otro dato interesante
que da Quinn es el periodo de vida adulta de las mariposas negras que puede ser
de tres o cuatro semanas. Dice también Quinn que la época del año en que son
más numerosas en Louisiana es en septiembre. Los estudios los ha llevado a cabo
con “trampas de luz”, pues estos lepidópteros son atraídos por la luz.
Mientras más leía
sobre este insecto más me llamaba la atención, pero casi sentí amor por él cuando llegué a un párrafo que traducido literalmente dice: “La Bruja
Negra no muerde, pica, ni produce enfermedades, solo tiene una lengua para
beber el néctar de las flores. Aunque
podría producir sobresalto si sale repentinamente del sitio en el que descansa
en el día.”
Pensé en su nombre
latino que viene del de Ascálafo, morador del infierno griego o Hades. Me dije que todas estas asociaciones con la muerte, el infierno y lo
siniestro sólo le vienen a esta polilla por ser negra, por no volar de día, o
quizás por ser diferente a las vistosas mariposas diurnas.
Se me ocurrió que
podría acuñarse un término para ese horror irracional a estos animalitos,
Podríamos llamarlo Diaforeticofobia, u horror a los distintos, de la
palabra griega que significa distinto.
Por cierto que el texto que leí y del que extraje los datos de este texto dice al final que:"si usted observa Brujas Negras, en especial fuera de Texas, por favor contacte a Mike Quinn (entomike@gmail.com) para tener una mejor comprensión de los movimientos de este insecto.