Buscar este blog

lunes, 14 de noviembre de 2016

PaCiencia Pa’Todos



Hoy tuve una mañana muy agradable, en la unidad de seminarios del campo 1 de la FES Cuautitlán. Fui a participar en la presentación de la revista PaCiencia Pa’Todos, junto con María del Carmen Climent Palmer, Patricia Miranda Castro, Francisco Montiel Sosa y Alma Luisa Revilla Vázquez.

Siempre me gusta volver a la FES-C y saludar a los amigos, pero hoy además había un ambiente de fiesta. El auditorio estaba lleno de estudiantes interesados en la divulgación de la ciencia. Algunos de sus maestros, con los cuales me unen lazos de afecto,  habían sido mis alumnos. Me acompañaba, para hacer más emotivo el momento mi amiga Maria Isabel Hernández, conocida más brevemente como Mabel y quien también fue profesora en la FES C.

Antes de empezar el evento recibí la playera oficial de la revista y me la puse inmediatamente sobre la camisa.

Paco Montiel inició la parte formal de la presentación,  transmitiendo los saludos del Director  Alfredo Cuellar, involuntariamente ausente. Ponderó las ventajas de la FES Cuautitlán y su verdadera vocación multidisciplinaria, después los editores presentaron el número actual de la revista, explicaron sus secciones y hablaron de los temas de los números que ya se preparan.

Terminada la presentación de la revista,  María del  Carmen Climent nos platicó su transición de veterinaria a comunicadora de la ciencia y los proyectos en los que ahora colabora. Dio algunos consejos de cómo realizar ese tránsito con mínimo dolor.

A continuación, Julio Cesar Morales, que oficiaba de maestro de ceremonias le dio la voz a Paty Miranda. Patricia habló de los muchos puntos en los que se había sentido identificada con María del Carmen, platicó sus experiencias en clase y la manera como motiva a sus estudiantes a interesarse en la ciencia.

En algún momento de su intervención Paty dijo: “…y le paso el micrófono a Rafael Fernández Flores”. Hasta ese momento yo no sabía muy bien que se esperaba que dijera (tampoco lo supe, con la invitación de Patricia). Había recibido por correo electrónico la revista en PDF y pensaba hablar de algunos de los artículos, felicitar el esfuerzo de los organizadores y hablar quizás de Ciencia, Conciencia y Café.

Cuando tuve el micrófono en las manos, frente a un auditorio lleno me sentí, como en una asamblea, me ganó el sentimiento y recordé, en voz alta, el compromiso tanto de Paco Montiel como de Andrea Trejo por cambiar la Universidad en la que vivíamos hace treinta años. Dije que sólo los inconformes cambian el mundo, los demás están muy a gusto.

Me di cuenta que corría el riesgo de salirme del tema del que se esperaba que hablara y aproveché las dudas vocacionales, que alguien en el público había manifestado en forma de pregunta a María del Carmen. Dije que yo también, como había hecho ella, iba a confesarme...en lo profesional.  

Hablé de mis dudas entre la literatura, la medicina y la física. De mi paso por el grupo de teatro de la prepa, de mis inicios en la divulgación, de mi amistad con Enrique Loubet, de las columnas que escribí para Comunidad Conacyt y para Revista de revistas, de los libros escritos a partir de ellas, de las entrevistas en la TV sobre los libros y del cómic Dime abuelita por qué.

Las preguntas que habían hecho antes, me hizo imaginar que el interés de los escuchas era el de saber cómo puede uno iniciarse en la divulgación de la ciencia; así que cuando llegué a esta parte, pensé que ya estaba hecho un buen resumen del tema y para terminar opiné sobre la vieja controversia de quién debe divulgar la ciencia, el científico o el comunicador.

Invoqué a León Felipe para hacer patente mi renuncia a ejercer repetitivamente cualquier oficio (para enterrar a los muertos, cualquiera menos el sepulturero). Llamé a no permitir que nos hagan callo las cosas, ni en el cuerpo ni en el alma y a seguir siempre haciendo actividades nuevas, emprendiendo nuevas tareas.

Después de eso terminé y me sentía satisfecho por la reacción de los oyentes. Pero tan pronto bajé del foro, empezaron los amistosos “reclamos”: No dijiste nada de Ciencia, Conciencia y Café, no hablaste de la Revista Marcha…

Entonces me di cuenta que hubo varias cosas que me hubiera gustado decir y que no dije, quizás si hubiera habido una sesión de preguntas al final y alguien lo hubiera solicitado, pero en fin, será para otra ocasión.

Voy a tratar de paliar esta falta escribiendo (más o menos pronto) algún texto sobre la Revista Marcha, a la que nos gustaba referirnos como “Marcha en la Universidad y la Universidad en Marcha.” Otro texto que la sesión de esta mañana me ha hecho notar que debo escribir es sobre Mabel Hernández. Ambos irán a la pestaña de Historia de la FES C de este blog.

Cuando acabé de hablar, Julio Cesar le dio la palabra a Alma Revilla, quien clausuró el evento.

Aquí podría terminarse esta rápida crónica, pero antes de hacerlo  voy a decir algo sobre la propia revista a la que deseo larga vida.

Me encanta la idea de la revista y el entusiasmo que percibo en el equipo que la elabora, pero percibo un reto enorme: En la propia presentación que los editores hicieron de la revista hablaron de otras revistas de la UNAM, entre ellas ¿Cómo ves?

No mencionaron a otras dos que también pueden servir de modelo a seguir (y superar): la Revista Digital Universitaria y la Revista de Educación Química.  Estas dos revistas, junto con ¿Cómo Ves? están en el índice de revistas de divulgación del Conacyt. Sé que es el primer número, pero desde ya creo que una buena meta sería estar en ese padrón.

El que la revista este en formato digital, hace su circulación mucho más fácil y económica. Ojala aprovechando ese hecho vayamos conociendo datos “bibliométricos” de visitas, descargas, artículos y autores más leídos, que permitan satisfacer las demandas del Conacyt para formar parte del índice.

En fin, linda tarea la que se han echado encima los editores, pero como dije esta mañana: sólo los inconformes cambian el mundo.

viernes, 28 de octubre de 2016

Request For Comments (RFC)





A continuación los primeros quince  mini relatos de base científica.  Quiero preparar una compilación, así que lectores científicos y no científicos mucho agradeceré sus comentarios, preferentemente en el blog.

1. Hipercomplejos.
Una persona ingeniosa me explicaba que el amor ocurre en el plano complejo, no sobre lo real, ni sobre lo imaginario. Lo pensé un momento y los cuaterniones de Hamilton, arruinaron su analogía.

2. Duda de física.
Ella respondió mi piropo, citando la 3ra ley de Newton. Supe que tenía que salir corriendo, con la misma intensidad, pero ¿en qué dirección?

3. Transición de fase
Ella ofrecía una relación sólida, él la quería más húmeda. El calor de sus miradas hizo la transición.

4. Incertidumbre.
El seductor estudiante de ciencia estaba comprometido, la inteligente compañera de clase detuvo sus avances:
-En mecánica cuántica hay estados prohibidos
-También dice la cuántica que una misma partícula puede estar en dos sitios diferentes al mismo tiempo, respondió cínicamente el muchacho.
Después todo fue incertidumbre.

5. Amor topológico.
Cuando le dije que mi amor por ella era infinito, me preguntó:
-¿Por qué el símbolo del infinito es un ocho horizontal?
- Pues porque es como una banda de Möbius, formada por los amorosos, en la que no hay exterior, ni interior, le dije sin dejar que nuestros cuerpos se separaran.

6. No es lo mismo.
Por qué nuestro amor es placentero y no causa dolor, ¿dices que es transgenérico?
No, linda, dije transgénico.

7. Honoris causa.
Me ve con picardía y pregunta.
–Se dice, ¿hacer el amor a alguien o hacer el amor con alguien?
Contesto, sin asomo de duda: -La preposición depende de la posición.
Me concede el doctorado en lingüística, honoris causa.

8. Demostración.
La perfección del ménage à trois, puede demostrarse matemáticamente: cuando una pareja -un binomio- se potencia a si misma dos veces, aparece un tercer elemento que los convierte en un trinomio cuadrado perfecto. QED

9. Universos perpendiculares.
Es muy fácil imaginar nuestras vidas en un  universo paralelo. Ahí  las cosas ocurren a la inversa: tu no existes, yo no te quiero: somos felices.
En los universos perpendiculares es diferente. Son espacios que se cruzan, ortogonalmente en un sólo punto. En ese punto común, nuestras vidas del otro universo, serían también las de este. Seguirías existiendo, te seguiría queriendo...

10. En promedio.
¿Cómo se declara el acusado?
-Culpable en promedio.
-¿En promedio?
-Si una parte mía no  tenía ganas de matarlo, pero si sumamos las ganas de hacerlo con las ganas  de no hacerlo y dividimos entre dos...
-Condenado a 18 años de cárcel, en promedio.

11. Ondas.
Tu voz es una onda mecánica, tu imagen es una onda electromagnética, tu ausencia es una…muy mala onda.

12. McLuhan.
Tu voz es aire, tu presencia vacío, dijo el poeta.
No confundas el medio con el mensaje, corrigió el físico.

13. Corolario.
-¿Sabrías resolver esta ecuación: Tres veces mi deseo por ti más dos veces tu inteligencia es igual a cuatro veces tu deseo por mí más una vez mi inteligencia?
-No, son muchas incógnitas, pero intuyo el corolario.

14. Tristeza blanca
-Tu ausencia me provoca  una tristeza blanca.
-¿Blanca?
- Sí, cuando vuelvo a ver tus ojos, el prisma de tu mirada la descomponga en colores.

15. Escalas.
¿En qué unidades se mide el deseo?
Grados Celsius
¿La decepción?
Grados Gay Lussac
¿Y el  amor?
En grados Richter. También sus réplicas

martes, 25 de octubre de 2016

Lilliput, el país de las maravillas.



¿Por qué recibieron el Premio Nobel de física los 3 premiados de 2016? Aunque el enunciado oficial parece complicado, el motivo del premio puede enunciarse de manera que prácticamente cualquier persona lo entienda: “Por predecir nuevas formas de agregación de la materia”.
La manera como los átomos se unen para formar la materia es la que determina su estado de agregación.  La mayoría de las personas identifica tres formas de agregación de la materia, que son los sólidos, los líquidos y los gases. Algunas personas reconocen una cuarta forma, que son los plasmas.

En los gases las fuerzas que mantienen unidas a las moléculas es muy débil, en comparación con las que los mantienen unidos en un sólido. En un líquido la fuerza que mantiene unidas a las moléculas tiene una intensidad intermedia a las de los otros dos estados de agregación.

Cuando a un material en uno de estos estados, se le agrega energía (o se le resta) puede llegar a cambiar su estado. Es así como un sólido se vuelve un  líquido o un gas se licúa. A estos cambios de estado se les llama transiciones de fase, identificando al estado líquido, gaseoso, o sólido con una fase.

Sin embargo estos estados no son las únicas fases de la materia. En general una fase está asociada con una manera particular de acomodarse los átomos en un material y si,  en un mismo sólido, lo hacen de manera diferente, ese sólido presenta dos fases distintas. Un ejemplo es el carbono que puede presentarse como sólido en una estructura de grafito, de carbono o de fullereno.

La manera en que se acomodan los átomos para formar un sólido (o un líquido o un gas) definen propiedades importantes como su conductividad eléctrica y térmica. El hecho de que un material sea conductor, semiconductor o aislante tiene que ver con la forma como están acomodados los átomos, es decir tiene que ver con la fase.

El templado y otros tratamientos térmicos que se aplican a los metales, tienen justamente como objetivo cambiar las propiedades físicas del sólido (asociadas a la manera como los átomos están acomodados) sin cambiar sus propiedades químicas. Es decir el metal no cambia, pero si sus propiedades físicas, como dureza, conductividad…

Muchos fenómenos interesantes están asociados a transiciones de fase, por ejemplo la transición de un material a un estado de súper fluido  o a un estado de superconductividad que consisten en un aumento de la conductividad eléctrica en el segundo caso y una disminución de la viscosidad, en el primero.

Propiedades como la conductividad o la viscosidad, conocidas como coeficientes de transporte,  varían cuando las dimensiones de los materiales disminuyen hasta que se convierten en nano materiales, como el grafeno, cuyo estudio por cierto está asociado también al otorgamiento de un premio nobel reciente.  

El estudio de la conductividad eléctrica en nano materiales, de prácticamente una sola capa de átomos llevó a dos físicos de Birmingham, David Thouless y Michael Kosterlitz, a principios de los años 70 del siglo pasado, a tratar de entender por qué está propiedad cambiaba de manera discontinúa. En un momento la conductividad tenía un valor y en seguida era del doble, sin pasar por valores intermedios.

Estos saltos en los valores de la conductividad se asociaron a transiciones de fase, es decir a reordenamientos de los átomos en las delgadas capas del material. La forma en que lo hacían, era totalmente desconocida en esos años y justamente Thouless y Kosterlitz propusieron un mecanismo para explicarlo. A este tipo de transiciones se les conoce como transiciones K-T, por las iniciales de los dos científicos y a las nuevas formas de acomodarse la materia,  les llamaron fases topológicas.

El origen del nombre viene de la matemática que está involucrada en el estudio de la mecánica cuántica que describe esos fenómenos.

Todo esto en los años 70 y 80 del siglo pasado.  Incluso en 1985 el físico alemán Klaus von Klitzing, recibió el Nobel por su estudio del efecto Hall cuántico, realizado en 1980. El experimento consistía en estudiar la conductividad eléctrica en una capa de muy pocos átomos de espesor y que se coloca en un campo magnético.

Este experimento de acuerdo a lo que menciona Jainendra k. Jain en su libro “Composite Fermions”, inició un nuevo campo de la física: “Las dos y media décadas anteriores han presenciado el nacimiento y evolución de un nuevo fluido cuántico que ha producido algunas de las más profundamente bellas estructuras en física. Este fluido se forma cuando los electrones se confinan en dos dimensiones, enfriados a una temperatura absoluta cercana al cero absoluto, sometidos a un fuerte campo magnético”. A estos nuevos fluidos se le llamó fluidos cuánticos topológicos.

Duncan Haldane, el tercer galardonado con el Nobel en 2017 -junto con Thouless y Kosterlitz- predijo que fluidos cuánticos topológicos, como los que aparecían en el estudio del efecto hall, podían formarse en capas muy delgadas de superconductores, aun sin la presencia de un campo magnético. En 2014 fue posible, enfriar capas muy delgadas de conductores y realizar el experimento que confirmó la predicción teórica del hoy premio Nobel.

Una vez que se conoció la existencia de estos nuevos estados topológicos, se empezaron a identificar otras circunstancias en las que la materia se encontraba organizada de esa forma. Una notable es la de las cadenas de imanes atómicos.

En el nivel microscópico existen dos tipos de imanes atómicos, los imanes pares y los imanes nones. Haldane demostró que una cadena de imanes pares tiene una estructura topológica; mientras que otra formada por imanes nones, no la tiene.  

Sin lugar a dudas se seguirán descubriendo este tipo de estructuras en otras situaciones  y pronto habrá aplicaciones tecnológicas derivadas de sus propiedades para conducir la electricidad.

Todo esto es realmente muy emocionante, no hay duda que el mundo de los nano materiales es el verdadero país de las maravillas.