Buscar este blog

jueves, 12 de marzo de 2015

Testamento Apócrifo-Político de Jorge Ludlow Landero

Este es un texto de 37 años de antigüedad, todas las frases que se citan son frases reales que usaba a menudo Jorge Ludlow. Quienes lo trataron, las recordarán posiblemente. El escrito que es una sátira a su manera de hablar, envolver, provocar y conciliar termina, al llegar a la séptima lección, siendo un reconocimiento.


Como ser el padrino en siete lecciones.


1. Sea empático.
Domine el manejo de frases que demuestran conformidad, pero no conceden nada. Por ejemplo:
  1. Por eso (Nombre de pila del interlocutor) estoy de acuerdo contigo, pero dentro de nuestro propio esquema de desarrollo…
  2. Es una afirmación muy temeraria, ¿no crees?, pero la podríamos discutir e incluso implementar un seminario.
  3. Comprendo su simpatía por el sindicalismo utópico..

2. Demuestre su popularidad
Mezcle dentro de la plática, con estudiado descuido, varios nombres de pila que hagan pensar en altos personajes de la política. Lo hará parecer muy popular en ese grupo. Use frases como:
  1. Se lo decía yo a Luis, ayer en la comida
  2. Incluso gente tan capaz como Rolando y Eliezer
  3. Ayer Pepe se lo dijo a Carlos: el bueno para gobernación es Pedro
  4. Estimo mucho a Felix, pero…

3. Muestre su eclecticismo.
Acuñe frases eclécticas para hablar (y convencer) a gente de todas las tendencias, por ejemplo:
  1. Dejemos de ser los buenos y los malos, los negros y los rojos
  2. Yo a su lado, soy reformista
  3. En política no hay verdad, hay éxito y eso hay que entenderlo

4. Encante a sus oyentes.
Cuando hable en público, refiérase a personas del auditorio (invitadas por usted) y trátelas de “experto” en tono informal y resultar encantador al resto de la audiencia. Use frases como las siguientes:
  1. Y si no que se los diga (nombre del amigo “experto”) que es experto en integración de Lesbegue (o el teorema de los cuatro colores)
  2. Gente tan valiosa como (Nombre del amigo experto) experto en simulación, se los puede decir.

5. Impresione con sus conocimientos.
Hable con tecnicismos ante personas no especializadas. Causa un gran impacto.
Por ejemplo en un discurso de bienvenida a alumnos de nuevo ingreso:
  1. Los reales son el único campo ordenado completo. Los complejos no están ordenados.
  2. Es trivial entender la derivada como un operador lineal, lo podemos discutir en dos minutos.

6. Contrargumente con humor.
Tenga un repertorio de frases para diferentes ocasiones:
Para aparentar ser dialéctico
No te adelantes a conocerme
Para mostrarse filosófico
La vida es el privilegio de equivocarse
Para parecer irónico
Yo creía que eras inteligente, pero ya me di cuenta que sólo tienes buena memoria.
7. Tenga talento.
Si ha asimilado las anteriores seis lecciones está a punto de convertirse en El Padrino, sólo falta esta última e indispensable lección, sin la cual nada de lo anterior sirve.



No hay comentarios:

Publicar un comentario