Este blog es una especie de respuesta anticipada a la invitación de Stéphane Hessel a indignarse. Nace de la indignación de que un grupo de profesores de la FES Cuautitlan –la mafia- haya por mas de 30 años usado y abusado los puestos de funcionarios y de elección popular.
Pero el blog se ha convertido también en un espacio donde se comparten experiencias docentes, temas de divulgación de la ciencia, literatura y opiniones.
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martes, 30 de junio de 2009
Encuentro “Cuántico”
El día de hoy tuve un encuentro muy agradables en los patios de la facultad. Siempre me cuesta trabajo cruzar la escuela, pues voy saludando a quienes me encuentro, me detengo y platico un rato. Hoy iba rumbo al laboratorio de física para la reunión de los profesores, cuando veo a lo lejos la inconfundible figura del tres veces M,Manuel Martínez Magadán. La verdad me dio mucho gusto verlo, hacía mucho tiempo que no lo saludaba. Sabía que está en el IMP, donde consume tiempo de computadoras haciendo cálculos de mecánica cuántica. No se exactamente que tipo de cálculos realice ahora, me acuerdo de Manuel como un estudiante muy interesado en los temas de física; le llamaban la atención la cuántica, la relatividad y la astronomía. Le di alguna optativa de cuántica y si no me falla la memoria Manuel fue después medalla Gabino Barreda. Me gustaría mucho que Magadán, como es más conocido, nos platique un día en el blog sus trabajos en el IMP, a lo mejor alguno de los estudiantes actuales de la FESC se motiva y se decide a estudiar Química Cuántica. La cuántica ha sido una de las áreas de atracción de los estudiantes de química con mayor inclinación a la teoría. Gente muy brillante como Federico Martín Polo, Javier Bourges, y Alberto Vela, son ejemplos de gente de Cautitlán que se ha dedicado en algún momento a su estudio.
Tocaste un punto muy interesante: la gente BRILLANTE, que ha salido de la facultad y ojalá anduviera alguno por ahí para que nos cuente en el blog, como le ha ido. A veces se invita a egresados a dar una plática, he visto en Comunidad entrevistas a ex estudiantes de la FESC que andan por el mundo logrando muchos éxitos, pero no sé si los estudiantes, especialmente los estudiantes, los conocen. Vamos a programar un "Ciencia Conciencia y Café" que incluya pláticas con egresados exitosos. A ellos les hará mucho bien. Siempre guardo lindos recuerdos de ese ciclo, donde pude conocer en persona, a gente realmente valiosa que si no hubiera sido por tí, nunca se hubiera parado en nuestra facultad. (Tengo atesorado un Tinisima con la dedicatoria de su autora y una foto que nos sacaron en el momento.) Un reconocimiento y premio: "Aplauso, medalla y beso." Y va en serio, hay que retomar ese giro cultural que ha perdido la facultad. Beatriz
Muchas gracias Beatriz. Hicimos hace diez años, con motivo de los 25 de la FESC, una plática en Ciencia, Conciencia y Café con egresados, uno de ellos Alberto Vela, quien en mi experiencia personal es uno de los tres mejores alumnos que he tenido en 35 años de experiencia. Otro es Rodrigo Carrrillo, quien se quedó en Estados Unidos a donde fue a hacer su doctorado. Rodrigo, siendo un estudiante de los primeros semestres de ingeniería, diseñó y montó un experimento para medir la duración del eclipse de sol de 1991. Los resultados de su trabajo los publicamos en un número extraordiario de Comunidad, que aun guardo y en el libro de "Para conversar de ciencia". Una de las razones por las que no puedo considerar prócer a Keller es justamente por la manera como agredió el programa de Ciencia, Conciencia y Café, para suspenderlo. El Programa regresó a la facultad gracias a Juan Antonio Montaraz.
Fijate que no recuerdo Ciencia Conciencia y Cafe durante la administracion de Juan Antonio Montaraz. O tuvo poca publicidad, o yo andaba en otro planeta.
Con Juan Antonio se organizaron el octavo, noveno y décimo ciclos dentro de las instalaciones de la escuela. El octavo, que era el que reanudaba las conferencias inició con una conferencia de Alejandro Pisanty, lo primero que dije al hacer la presentación que reanudaría el ciclo fue: "deciamos ayer..." las míticas palabras de San Juan de la Cruz, al ser restituido a su cátedra. El décimo ciclo (el que conmemoraba el 25 aniversario de la escuela) no se concluyó, porque la huelga de 1999, lo interrumpió. En el verano de ese año hubo grandes inundaciones en el país y la embajada de Francia estaba buscando hacer un programa de divulgación. Hicimos como prueba una sesión de Ciencia, Conciencia y Café en la Casa de Francia (Havre 15) sobre el problema de las inundaciones, visto desde tres vertientes distintas por especialistas de diferentes disciplinas. La reunión fue un éxito y planeamos para el siguiente año el decimoprimer ciclo, que se realizaría en las instalaciones de la Casa de Francía y con el nuevo formato de tres especialistas diferentes en diálogo con el moderador, que seguía siendo yo. Ahí Ciencia, Conciencia y Café inició su tercera época, con un formato diferente y también con un público diferente. El programa se abrió a la población en general y venía gente, no solamente de la UNAM y de Cuautitlán, que también lo hacían, sino de todo tipo. Estudiantes de secundaría, profesionales, profesores, amas de casa..., teníamos un núcleo fijo de asistentes y otro grupo que variaba según el tema. Las pláticas las cubría Comunidad y Gaceta y salían notas sobre las conferencias en ambas publicaciones. Debo decir que sin el apoyo de la Facultad, que cubría toda la logística no hubieramos podido hacer las pláticas. Varias veces la gente de Cuautitlán preguntó porque no llevar de regreso el programa a la facultad. La razón era para no crearle problemas al director. El mismo grupo que hoy controla el Consejo Técnico vivía pensando en que yo iba a regresar a lanzar mi candidatura a la dirección y que Ciencia, Conciencia y Café era un programa de promoción personal, por lo tanto hostigaban contra él. En Casa de Francía no podían presionar y todos contentos. Ahí realizamos tres ciclos más. El último ponente fue Octavio Rivero Serrano. Terminamos las conferencias cunando Margarita Ontiveros, Coordinadora de Extensión, se fue de la FESC para hacer estudios de posgrado en el extranjero.
Ahora si, de los eventos en Casa de Francia si me acuerdo, aunque nunca asistí. Recuerdo haber visto la información en Comunidad, pero los de la facultad... creo que solamente asisti al de Pisanty que lo hicieron en la explanada de la Biblioteca en Campo I, no? Fue donde conoci a Margarita. Tiempos idos... ahora hay que planear los siguientes ciclos, dentro de la FESC.
Tocaste un punto muy interesante: la gente BRILLANTE, que ha salido de la facultad y ojalá anduviera alguno por ahí para que nos cuente en el blog, como le ha ido.
ResponderEliminarA veces se invita a egresados a dar una plática, he visto en Comunidad entrevistas a ex estudiantes de la FESC que andan por el mundo logrando muchos éxitos, pero no sé si los estudiantes, especialmente los estudiantes, los conocen.
Vamos a programar un "Ciencia Conciencia y Café" que incluya pláticas con egresados exitosos. A ellos les hará mucho bien.
Siempre guardo lindos recuerdos de ese ciclo, donde pude conocer en persona, a gente realmente valiosa que si no hubiera sido por tí, nunca se hubiera parado en nuestra facultad. (Tengo atesorado un Tinisima con la dedicatoria de su autora y una foto que nos sacaron en el momento.)
Un reconocimiento y premio: "Aplauso, medalla y beso." Y va en serio, hay que retomar ese giro cultural que ha perdido la facultad.
Beatriz
Muchas gracias Beatriz. Hicimos hace diez años, con motivo de los 25 de la FESC, una plática en Ciencia, Conciencia y Café con egresados, uno de ellos Alberto Vela, quien en mi experiencia personal es uno de los tres mejores alumnos que he tenido en 35 años de experiencia. Otro es Rodrigo Carrrillo, quien se quedó en Estados Unidos a donde fue a hacer su doctorado. Rodrigo, siendo un estudiante de los primeros semestres de ingeniería, diseñó y montó un experimento para medir la duración del eclipse de sol de 1991. Los resultados de su trabajo los publicamos en un número extraordiario de Comunidad, que aun guardo y en el libro de "Para conversar de ciencia".
ResponderEliminarUna de las razones por las que no puedo considerar prócer a Keller es justamente por la manera como agredió el programa de Ciencia, Conciencia y Café, para suspenderlo. El Programa regresó a la facultad gracias a Juan Antonio Montaraz.
Fijate que no recuerdo Ciencia Conciencia y Cafe durante la administracion de Juan Antonio Montaraz. O tuvo poca publicidad, o yo andaba en otro planeta.
ResponderEliminarCon Juan Antonio se organizaron el octavo, noveno y décimo ciclos dentro de las instalaciones de la escuela. El octavo, que era el que reanudaba las conferencias inició con una conferencia de Alejandro Pisanty, lo primero que dije al hacer la presentación que reanudaría el ciclo fue: "deciamos ayer..." las míticas palabras de San Juan de la Cruz, al ser restituido a su cátedra.
ResponderEliminarEl décimo ciclo (el que conmemoraba el 25 aniversario de la escuela) no se concluyó, porque la huelga de 1999, lo interrumpió.
En el verano de ese año hubo grandes inundaciones en el país y la embajada de Francia estaba buscando hacer un programa de divulgación. Hicimos como prueba una sesión de Ciencia, Conciencia y Café en la Casa de Francia (Havre 15) sobre el problema de las inundaciones, visto desde tres vertientes distintas por especialistas de diferentes disciplinas. La reunión fue un éxito y planeamos para el siguiente año el decimoprimer ciclo, que se realizaría en las instalaciones de la Casa de Francía y con el nuevo formato de tres especialistas diferentes en diálogo con el moderador, que seguía siendo yo.
Ahí Ciencia, Conciencia y Café inició su tercera época, con un formato diferente y también con un público diferente. El programa se abrió a la población en general y venía gente, no solamente de la UNAM y de Cuautitlán, que también lo hacían, sino de todo tipo. Estudiantes de secundaría, profesionales, profesores, amas de casa..., teníamos un núcleo fijo de asistentes y otro grupo que variaba según el tema. Las pláticas las cubría Comunidad y Gaceta y salían notas sobre las conferencias en ambas publicaciones.
Debo decir que sin el apoyo de la Facultad, que cubría toda la logística no hubieramos podido hacer las pláticas. Varias veces la gente de Cuautitlán preguntó porque no llevar de regreso el programa a la facultad. La razón era para no crearle problemas al director. El mismo grupo que hoy controla el Consejo Técnico vivía pensando en que yo iba a regresar a lanzar mi candidatura a la dirección y que Ciencia, Conciencia y Café era un programa de promoción personal, por lo tanto hostigaban contra él. En Casa de Francía no podían presionar y todos contentos. Ahí realizamos tres ciclos más. El último ponente fue Octavio Rivero Serrano. Terminamos las conferencias cunando Margarita Ontiveros, Coordinadora de Extensión, se fue de la FESC para hacer estudios de posgrado en el extranjero.
Ahora si, de los eventos en Casa de Francia si me acuerdo, aunque nunca asistí. Recuerdo haber visto la información en Comunidad, pero los de la facultad... creo que solamente asisti al de Pisanty que lo hicieron en la explanada de la Biblioteca en Campo I, no? Fue donde conoci a Margarita.
ResponderEliminarTiempos idos... ahora hay que planear los siguientes ciclos, dentro de la FESC.