En el sistema de elección de directores, la universidad ha privilegiado la calidad sobre la cantidad. No quiere decir esto que la opinión de la comunidad no cuente, quiere decir que cuenta a través de los funcionarios y autoridades universitarias que van, en las diferentes etapas del proceso conociendo la opinión de la comunidad.
El viernes de la semana anterior terminó la primera etapa del proceso de elección de director de la FESC, que consiste en que el secretario general de la UNAM conozca nombres de universitarios que reúnan los requisitos para integrar la terna y según lo que me cuentan se dieron manifestaciones masivas, como las que antaño se llamaban “acarreo” para proponer el nombre de……la directora!!!!
No se trataba de ver quien tiene más simpatizantes, se trataba de conocer nombres de personas que puedan integrar la terna. ¿Alguien puede tener duda de que al nombre de la directora va a ser considerado? ¿No bastaba con unas pocas personas, de preferencia no funcionarios que con discreción y elegancia, visitaran al secretario general, propusieran su nombre y le dieran algunos argumentos más allá de la masividad? ¿Era necesario tanto despliegue, en esta etapa del proceso? ¿No es como arrancar el maratón a ritmo de 100 metros?
En un análisis simple parece que efectivamente la respuesta es no, no era necesario. Sin embargo, una segunda pensada nos hace ver que si bien ese despliegue no era necesario para que su nombre se mencionara, si le era necesario, a ella, para tratar de responder a las mantas que piden la no reelección de un grupo al que aquí hemos llamado la mafia. Eran necesaria para tratar de decir: “son más los que quieren la reelección” ¿Dejó de creer la directora en que la calidad es más importante que la cantidad, en estos procesos? ¿Vamos a ver grupos masivos de funcionarios visitando a la Junta de Gobierno, durante el proceso?
Me parece que sería mejor que los candidatos, incluida la directora, traten de convencer a la comunidad de la FESC, a las autoridades y funcionarios de la UNAM, de la calidad de su programa de trabajo en vez de dar demostraciones de "fuerza" que solo muestran inseguridad y paradójicamente debilidad.