¿Cuál es el Proyecto de superación académica para el personal?
Empiezo por el proyecto de superación académica para el personal, por que es punto de partida para responder otras de las preguntas que en éste apartado plantea Andrea. Me acuerdo que el primer paro estudiantil de la ENEP en 1977, solicitaba, desde entonces, buenos maestros en uno de sus puntos del pliego petitorio. A esa demanda, el Dr. Guzmán, director en ese momento, le respondió al “Socio”, uno de los líderes de ese movimiento, que no se preocupara que iba a haber cursos de capacitación para los profesores. El Socio le respondió: No queremos malos profesores capacitados, queremos buenos profesores”.
Digo esto por que a mí me gustaría que en la FESC hubiera puros buenos profesores y que se capacitaran, pero eso es, estadísticamente, imposible. Me conformo con que haya la mayor cantidad posible de buenos profesores queriéndose capacitar. Para mí un buen profesor no es el que sabe más, es el que tiene más ganas de ser mejor. Es decir, me parece más importante la actitud, que la aptitud.
Con eso como premisa de entrada, el proyecto de superación académica estará orientado a quienes quieren aprender no solo lo más actual de sus campos profesionales, sino a incorporar las tecnologías de la información en su ejercicio docente.
Supongo que estarás de acuerdo en que la superación es producto de la voluntad. Ya se pueden hacer obligatorios los curso de capacitación, si no hay deseo de los profesores de aprender y superarse nos quedaremos en las estadísticas de cursos impartidos y maestros “capacitados”. Así que el reto es motivar a los profesores a capacitarse no solo por los puntos para el PRIDE sino para adquirir conocimientos que los hagan ser mejores profesores, más reconocidos por sus estudiantes y más satisfechos profesionalmente.
Las premisas básicas del Programa de superación serán:
- Programación de cursos acorde a las necesidades de la Facultad y los intereses de los profesores.
- Formación pedagógica
- Uso de la tecnología
¿Qué hacer con los profesores que no tienen ese deseo de superación?
Respetar sus derechos, asignarles grupo y que sea el propio juicio de los estudiantes el que los vaya motivando a cambiar de actitud.
¿Cómo se apoyarán las diferentes asignaturas de los nuevos planes de estudio?
Acá también te platico una anécdota para empezar a comentar el tema. Cuando era Secretario Académico y empezamos con Keller a ver el tema de los planes de estudio, me parecía tan evidente su vinculación con el tema de la capacitación de los profesores, que le decía de broma a Jaime Keller, que podíamos ahorrarnos el paso de elaborar los nuevos planes, que mejor nos trajéramos los planes del MIT o de Caltech, pero que nos trajéramos también a los profesores. Es decir que ningún plan es realmente “nuevo” si los profesores no renuevan sus conocimientos, sus actitudes y sus recursos didácticos. Las diferentes ofertas de superación deberán alinearse razonablemente con las necesidades que la operación de los nuevos planes de estudio vaya requiriendo. Y si esa capacitación va en el sentido de usar más las tecnologías informáticas, pues queda claro que se apoyarán esas asignaturas con profesores mejor capacitados, equipos de cómputo y software.
¿Cómo mejorar la eficiencia terminal de las diferentes carreras?
En algún sentido la titulación es parte del plan de estudios. La carrera no se ha terminado en tanto no se obtiene el título. En ese sentido ya habíamos, desde 1984, propuesto que los paquetes terminales en Ingeniería de Alimentos -quizás hoy dirías también los Talleres Multidisciplinarios- pudieran ayudar a mejorar la eficiencia terminal, si al cursarlos se va desarrollando parte del trabajo de la opción de titulación. Creo que para mejorar la eficiencia terminal es necesario que la titulación no sea un requisito adicional al terminar de cubrir los créditos, sino que pueda ser un trabajo que forme parte de los créditos a cubrir.
Poder hacer eso requiere que haya profesores capaces de encuadrar y dirigir esos trabajos de los estudiantes de último semestre, lo que se vincula igualmente con el tema de la superación académica.
Volver curricular la titulación, también tiene que ver con un tema de equidad, pues los profesores que tengan acceso a esos estudiantes de últimos semestres, estarán en mejores condiciones de dirigir trabajos de titulación. Una alternativa es que existan en los semestres terminales asignaturas con el nombre de trabajo de titulación 1 o 2 y que los alumnos la deban inscribir y la puedan “cursar” con el profesor que ellos elijan, en un horario semanal fijo y en una modalidad de asesoría y trabajo dirigido. Obviamente con los criterios de evaluación que garanticen la calidad de los trabajos realizados.
No es el punto aquí, pues preguntas por mejorar la eficiencia terminal y no por ir abatiendo su rezago, pero el tema de los diplomados como opción de titulación es un tema también a analizar.
¿ A los talleres multidisciplinarios se les asignarán recursos?
Entiendo tu preocupación por un tema de interés particular en la carrera de Ingeniería de Alimentos, aunque la respuesta es general: Todo proyecto en curso deberá tener recursos. La planeación se encarga de que haya una correspondencia entre recursos y programas de manera que la cobija alcance para todos. Como me enseñó Víctor Guerra: “Prioridad que no se traduce en el presupuesto, no es prioridad”
¿Cómo se lograrán mejores condiciones de estudio para los estudiantes?
Este es uno de los puntos que deberían ser más importantes para un director. Es también quizás uno de los de mayor desequilibrio con respecto a las facultades de Ciudad Universitaria, empezando por el costo -en horas y en pesos- del transporte. Es también uno de los más difíciles de resolver porque la solución de muchas de las dificultades que se presentan, no está únicamente en las manos del director. La solución pasa muchas veces por autoridades en los tres niveles de gobierno en el país y en la UNAM por recursos que no siempre existen y por instancias administrativas externas a la Facultad.
Sin embargo creo que hay cosas que con relativamente pocos recursos se pueden hacer como habilitar espacios agradables para el estudio, dar acceso a los estudiantes a la conectividad y uso de software a través de los convenios que tiene la UNAM, mejorar la oferta de la programación cultural y hacer una promoción adecuada de los programas de movilidad y becas.
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